Mis textos
muchas veces, por no decir siempre, son mecanismos de evasión de realidades.
Escribir es
el hermoso deporte que practico cada tanto, para abstraerme de mi aburrida
cotidianidad. Un ejercicio mental de combustión interna que prende fuego a mis más
aburridas rutinas.
Una palabra mira
de lejos a otra palabra, se juntan tímidamente, se organizan para una frase.
Una frase que toca la guitarra y pone a rodar la música. Y entonces, un
encadenamiento de encantos, una conjunción de hechizos.
Me encanto.
ResponderEliminarMuchas gracias, Milagros! Gracias por pasar a leer, muchísimas.
ResponderEliminar