sábado, 23 de junio de 2012

Alejandra Pizarnik - En extrañas cosas moro


Simplemente no soy de este mundo... yo habito con frenesí la luna. No tengo miedo de morir; tengo miedo de esta tierra ajena, agresiva... no puedo pensar en cosas concretas; no me interesan. Yo no sé hablar como todos. Mis palabras son extrañas y vienen de lejos, de donde no es, de los encuentros con nadie... ¿qué haré cuando me sumerja en mis fantásticos sueños y no pueda ascender? Porque alguna vez va a tener que suceder. Me iré y no sabré volver. Es más, no sabré siquiera que hay un “saber volver”. No lo querré acaso.

miércoles, 20 de junio de 2012

Siempre en las palabras


Siempre con las distancias, siempre con los silencios.
Siempre disfrazándome de abstracción.
Siempre queriendo escapar de la cosa concreta, de la cosa tangible.
Siempre asumiendo que mis alas vuelan y que mi locura es sana.
Siempre ocultando verdades detrás de las mentiras.
Siempre cayendo parado esquivando el piso.
Siempre burlándome de la pateticidad de mí ser, enojándome con mi humor.
Siempre habitando la noche, siempre tomando como amiga la oscuridad.
Siempre en las palabras que describen vacíos, siempre llenándome con ellas.
Siempre esperando que mi esperanza se acabe cuando primero lo haga la eternidad.
Siempre con tanta sed de amor, con hambre de beber hasta alcoholizar mi corazón.
Siempre en las palabras, lejos de la acción.

domingo, 10 de junio de 2012

El eventual mundo y la luna naranja


Las palabras caen de gota en gota sobre la hoja digital.
El reloj da las cinco y veintiséis y yo me preocupo por los mareos molestos que me inquietan.
La perdida de tiempo también me preocupa pero la danza hipnótica de la rutina me hace seguir.
Me olvido pronto de los mareos y vuelvo a viajar.
Esquivo las luces y me refugio en las sombras.
Soy una enfermedad para mi integridad física y en este momento no necesito mucho de mis neuronas.
Las alas aparecen en mi espalda y las palabras vuelan, es fácil atraparlas, es fácil agruparlas.
Escapo de la rima y de la música, me voy por cualquier camino, me pierdo, me gusta hacerlo de vez en cuando.
Me disipo en las sombrías ventanas que se abren y mi vapor forma una casa de muchas puertas.
De pronto la puerta más grande se abre y sale de allí una gran vaca de tres cabezas.
Demonios pequeños saltan a su lado, son simpáticas sus risas y revolotean alrededor del eventual mundo.
La incertidumbre aparece de un chispazo y reparte certezas a los invitados, sirve en bandejas las cabezas de la vaca ya sacrificada y esparce su sangre azul por todo el espacio.
Mientras tanto el intermitente cielo fucsia dibuja una luna naranja con aromas de limón, y yo corto en rodajas la tierra y me esfumo entre las cenizas que invaden el aire.

jueves, 7 de junio de 2012

¿Como explicar la piel de gallina?


Como explicar las emociones que no se explican, como se hace para decir con palabras lo que se siente en el lenguaje de los latidos
Como se hace para decirle al que desconoce lo que es la pasión por la música y las palabras lo que sucede cuando suenan Los Redondos y el corazón escucha su magia.
Como puedo transmitir lo que yo siento a una persona  que nunca supo extasiarse ,porque nunca encontró los motivos que lo llevaran a ese tan hermoso sentimiento.
Quien me puede explicar en un idioma entendible por que siento lo que siento y por que no puedo transmitir ese sentimiento elocuentemente a personas que me gustaría que sientan lo mismo.
La música tiene caminos que son hermosos, rodeados de poesía cuando es de calidad. El rock es mejor con ese elemento mágico que son las palabras ensambladas para  generar la emoción, el rock debe ser contestatario y romper reglas, barreras y criticar la mierda del mundo. Pero sobre todo, cuando alguien pretende hacer de su vida un rocanrol y plasmarlo en una banda de rock, es necesario primero ponerse la camiseta y transpirarla.
Eso es lo que hicieron los Redondos al elegir el camino de la independencia musical, de la independencia creativa, de la independencia del alma. Muchos otros en su lugar hubiesen elegido el camino fácil de la producción a cargo de una discográfica que le marque el camino, que le marque las canciones, que le quite esas independencias. Ellos eligieron transpirar la camiseta y construir desde ahí su gigantesco imperio.
Ese tan grande reinado del Rock hoy sigue en vigencia, aunque sus reyes hayan elegido caminos distintos. Detalle que me resulta menor, pues disfruto tanto de sus canciones en el presente por separado que cuando estaban juntos. Pero lo que realmente quiero trasmitir con este humilde texto es esa indescriptible “piel de gallina” que se siente al oír su música llena de magia y Rock & Roll, una emoción allí dentro donde habita el corazón y la razón pocas veces puede acceder a explicar los motivos que te hacen conmover. Es como un viaje placentero y lleno de éxtasis hacia lo más autentico del ser humano. Esa música te acompaña, te abraza, te entiende, te elige, te sobrepasa y el cuerpo responde con latidos, con piel de gallina, con la garganta queriendo imitar su voz, con tu lengua alocada tratando irracionalmente de buscar que las palabras suenen igual a la canción. Y al terminar la canción uno termina con el alma feliz, con el corazón haciendo pogo, con tu vida con más esencia, con más magia y todo por una canción, que en realidad parece simplemente eso pero detrás de ella se esconde el arte.